jueves, 1 de octubre de 2015

Girasoles taciturnos.

Los vimos pasar, día tras día, hasta que su color pipa se apagó.
Hacia abajo, apesadumbrados por su falta de pigmento, su carencia de melanina.
 
Susurraban callados que pronto pasaría, que el calor se los llevaría de paseo, hacia un lugar mejor.
 
Y allí me senté, en medio de todos ellos. A escuchar su silencio, a escuchar sus lamentos.
Comencé a coleccionar las cascaras de sus recuerdos, de los viajeros que en furgoneta se asomaban para olfatear su aroma. Un volumen inmenso de "quiero una fotografía entre ellos", y un puñado de pétalos robados.
 
Sabemos que en tiempos de flores volverán a nacer, y traerán consigo la "Primavera de Vivaldi". Brindarán por todos los que fueron talados, y por todos aquellos que murieron en un banco comidos uno a uno.
 
Y allí esperaré, en medio de todos ellos.
En medio de un campo de taciturnos, callada, silenciosa, melancólica. Creyendo que volverás a crecer, igual de fuerte y de amarillo como la última vez.
Igual de apacible como cuando te arranqué.
 
 
 
 

domingo, 1 de marzo de 2015

SAL, VA la VIDA en ello.


Irradia calor antes de explotar, y en un misero segundo todo vuelve a ser rojo como la puesta de sol de verano.

Como esos destellos parpadeantes, que te ciegan por su ternura al explotar en tus mejillas.  Esas gotas cristalinas, que amenizan el dolor y dejan caer lo que todavía estaba bajo llave.
Que brotan e inundan, que desbordan y resbalan arrastrando esas palabras mal dichas, mal entendidas, mal digeridas, mal comidas.

Y es que no me sentó bien la cena tan aderezada, tan solapada con la merienda y tan cerca del desayuno del día posterior. Que estoy empachada de los lamentos fingidos, de los que no son internos. De esos que se esconden tras una sonrisa mal dibujada, y a penas perfilada (sin carmín, ni bálsamo labial).

Que el tiempo tuvo un principio y tendrá un fin.
Tendrá un principio y tuvo un fin, depende de por donde empecemos, si por el final o por el inicio.

Que no sirve de nada salir sin estar preparado, y menos aún sin abrigo ante una tempestad.


Porque el calor se ha ido aunque ya ha explotado. Aunque ya esta rojo, y está quemado. Aunque ya esta dicho y está grabado.

El calor se ha ido, y te ha quitado la mitad del frío que te daba abrigo. Ese mismo, que anteriormente como hemos dicho, necesitas para enfrentarte a ti mismo.

martes, 10 de febrero de 2015

Mai escoltem, de vegades sentim.


Agafa el meu mástil com si fora una guitarra, i afina les meves cordes per a entendre el que em passa.

Ascolta la meva melodia i entona un métode per a reproduir-la, una vegada i un altra, i un altra i una vegada mes....fins que s'afone el pentagrama.

Dos per quatre acompasa la meva nostàlgia, i es ralentitza fins al silenci.
Fins a trobar l'absència de soroll.

Mig temps d'espera i tornem a començar.

Primera estrofa i quasi no sona.

Segona estrofa i mai rebosa.

Ascolta la meva melodia, disfrutala una última vegada.
Ascolta les notes intercalades, destapa el meu ritme i després, deixa d'ascoltar per a sempre.

martes, 20 de enero de 2015

Karma cremat.




- Com deies que t'anomenaves?

Karma Cremat.

- Cremat és el teu cognom?

Cremat, quemado, es como me han dejado.

Me exigieron demasiado, y yo, señal tras señal intenté dar el golpe de aviso.

Un aviso claro, conciso, y concreto. Amb 'c', com cremat.

Se acogen a mi curso de energías, a mi círculo eléctrico, y yo me desespero.

Me exaspera observar cómo se estrellan, aun sabiendo que no es lo que les toca.

-Però que puc fer jo?

Puedes anhelarme todo lo que quieras, pues no existes si no me deseas.

Soc abstracte, com la bogeria.

Soy cobarde por naturaleza. Soy ese deseo de que algo bueno llegue, te llene, te reinvente.

Ese toma y daca, que esperas que devuelva tu gran obra malhecha.

No creus que tinga raons per a somniarte?

Somnia tot el que vulgues, això no està prohibit.

Pero no te prohíbas fallar en el intento. No me culpes de tus desconciertos.         

No me atrapes y acapares, pues hay veces que estoy medio muerto.

Hay veces que quemo. Em creme. Te quemo.