jueves, 6 de mayo de 2010

molta ingenuità.

¿Prometemos cosas que sabemos no poder cumplir?
¿Nos mentimos, para aumentar nuestra credibilidad?

Cada letra es totalmente gratuita, las comas, las pausas...
¿La reacción de estas? Conllevan un peso, que muchos creen tener exento.
Otros (no tan sabios) ingenuos, pagan cada gramo y cada acento, en sus propias carnes. Se forman moretones, que dejan huellas. Se forman cascaras repletas de grietas.

Hoy la historia va de preguntas.


¿Crees saberlo todo a tus 21 años? Quisiera responder que no, pero irremediablemente se más de lo que me gustaría saber.
Conozco dolor, inseguridad, placer, deseo y sobre todo desorientación. No son nombres propios, pero están llenos de importancia.

En un sendero de tierra el camino no está señalizado, como te salgas de tu dirección...la has cagado amigo.
Podríamos ser como Hansel y Gretel; un camino repletito de dulces que ir comiéndose hasta llegar al horrible horno de la bruja.

¿Acaso no es eso parecido a la ingenuidad? Puede ser, si...mmm, puede ser. Comerse caramelos que te llevan a algo desconocido puede ser peligroso, SI.
Mmmmm...no se, no se..¿y si no fuera una bruja lo que me esperase? Mira...que soy muy golosa.


Sopesándolo mejor, creo que construiré yo mi propio camino. Me alejaré de huellas condicionadoras y caramelos corruptos.
Si mi final es amargo, que sea por propia elección. Si mi final es sabroso, relameré hasta la última migaja (y bien agustito, con pan y todo).

No hay comentarios:

Publicar un comentario